martes, 10 de enero de 2017

Buscando esposa (Bridgertons 8), Julia Quinn


Todos los hijos de Violet y Edmund Bridgerton han pasado por el altar. Todos menos Gregory, el ultimo de los hermanos, quien sigue esperando encontrar a la mujer de sus sueños. Cuando, en una fiesta, sus ojos se posan sobre la bella Hermione Watson, se convence a si mismo de que ella es la elegida. Sin embargo, la practica y discreta amiga de Hermione, Lucy Abernathy, frustra sus esperanzas de conquista al informarle de que el corazon de su amiga pertenece a otro hombre. El romantico Gregory no cejara en su lucha y, con la ayuda de Lucy, intentara seducir a la hermosa Hermione, aunque obtendra un resultado muy diferente al esperado: sin apenas darse cuenta, la amistad de Lucy y Gregory les llevara a un sentimiento mucho mas profundo y Gregory descubrira que es ella, con su franca sonrisa y su inteligencia, quien realmente ocupa su corazon. Pero tal vez ya sea demasiado tarde: Lucy ha sido prometida en un matrimonio de conveniencia. A las puertas de la iglesia, Gregory debera jugarse el todo por el todo para evitar que el verdadero amor se le escape de las manos para siempre.


Cuando llevas siete libros de una serie y hace varios que has leído la historia de tu personaje favorito no se puede decir que encares la lectura de los demás con muchas ganas y eso es lo que me ha pasado a mí con la familia Bridgerton, que una vez leído el libro de Colin no tenía ganas de más familia, así que a Gregory no le dirigía ni la mirada. Pero, ey, una es muy aplicada en su trabajo y ya no podía dejar más tiempo a Gregory esperando a saber si se casaba o se metía cura, así que he tenido que hacer el esfuerzo de ponerme al tema. ¿Habrá conseguido que cierre mi etapa Bridgerton con un buen sabor de boca...?


Mi Bale dice que sí, mi Elba que no... ¡Hagan sus apuestas!

Gregory Bridgerton es un romántico empedernido. A pesar de ser el único soltero de la familia (y, por ello, sentir la presión de su madre para que se case) sigue esperando el flechazo de Cupido, ése que hace que suenen campanillas y músicas celestiales, se te corte la respiración y el riego hacia la boa te aumente desbocado cuando conozcas a tu amada. Y eso justo le pasa al conocer la nuca de Hermione Watson (sí, la nuca, la espalda, no me preguntéis, por favor, porque yo no entiendo los gustos de Gregory). Pero vamos, que él es uno más dentro del festín de disparos que el querubín loco se da cada vez que Hermione aparece porque no hay hombre que la vea y no se quede enamorado. Si lo sabrá Lucy Abernathy, su mejor amiga, acostumbrada a desaparecer por completo al lado de tan magna belleza. Una pena que Gregory no tenga nada que hacer con Hermione, ya que está enamorada de otro. Aunque claro, puede que eso no sea obstáculo para él, ya que inicia el libro interrumpiendo una boda para declararle su amor a la novia...


No puedo con la intriga no puedo con la intriga

Menudo arranque, ¿eh? Pues sí, empezamos quedándonos de pasta de boniato para luego hacer un retrospecter y ver cómo puede ser que nos hayamos plantado ahí. Y cuando vamos viendo cómo Gregory conoce a Lucy y a Hermione y se enamora de la segunda...


Nuestra cabeza

Pues sí, eso nos pasa porque nuestro protagonista se enamora de la mejor amiga de nuestra protagonista. ¿¡¿Pero qué invento es esto?!? Pues el que se saca Julia Quinn de la manga para mantenernos intrigadísimas el resto de la novela. A ver, estamos hablando de los Bridgerton, o sea, que esto es un nadismo, no esperéis ahora Flores en la tormenta o una de Joanna Bourne. Aquí nos vamos a dedicar a ver cómo puede ser que Gregory y Lucy acaben juntos. Si es que lo hacen, claro, porque la Quinn se guarda un as en la manga que te deja...


Kim en pleno viaje astral leyendo esa parte

Gregory y Lucy son los únicos destacables dentro del mar de personajes planos y sin fuste de la novela (quitando, por supuesto, a las special guest stars, los Bridgerton que tienen a bien asomar la cabecita por el libro y alegrarnos la vida -entre los que está mi Colinjsdhafkjshafjksa-). Gregory es un chico alegre y optimista y sinceramente es una gozada verle aparecer por las páginas y escuchar sus pensamientos (y esto tiene mérito teniendo en cuenta que Gregory es uno de esos Bridgerton que no me importaban un pimiento y cuyo libro no me apetecía leer). De tan optimista que es a veces parece un poco tolai pero a ver qué vas a esperar del que espera eternamente la clase de amor del que hablan los poetas. Por supuesto, siendo un Bridgerton siente la presión de ser el único retoño de mami Violet que no está casado y el que evita que ésta vea su obra cumbre (casar bien a todos sus hijos) culminada pero ya tiene el culo pelado de torear a todos. Lucy, sin embargo, no sabe torear a nadie. Es una chica eminentemente práctica y ordenada, que va por la vida pidiendo perdón constantemente y que sabe que el amor loco está destinado para otras como Hermione y que se conforma con llevar una vida cómoda al lado del marido que le ha sido escogido. A pesar de ser tan distintos, tienen en común más de lo que creen ¡menuda sorpresa! *ironía mode on* (ambos tienen la maravillosa manía de hilar pensamientos sin ton ni son mientras deberían prestar atención a otra cosa) y acaban entablando una especial amistad basada en la sinceridad y en los diálogos lanzapullescos... y en que Gregory se beneficie a Hermione. 


No hacemos carrera con él

El hecho de que se cruce todo el pisto de Hermione por medio, si bien mola porque nos da un incentivo inesperado, también nos quita tiempo de la historia de amor principal (incluso Lucy puede llegar a parecer el segundo plato -aunque ya se dedican luego a dejarnos claro que no lo es, lógicamente-). El resto de personajes, pues lo que os he dicho, más planos que mi alisado japonés (salvo los Bridgerton). El tío de Lucy tiene algo más de chicha pero mñe igualmente. No os vais a hartar de momentos ahsafdjashfkas porque hay poquitos y llegan bien tarde (el nivel de ranciedad de Cassie approves this) y el final es trepidante pero muy precipitado y caótico, no le vendría más un poco más de tiempo para hilar todo mejor. Y sí, tiene epílogo, que sé que para muchas es importante. Es cuqui y bien podría ser el inicio de otra saga si la Quinn quisiera, los Bridgerton Reloaded. 


¡Estamos preparados para encandilaros!

La verdad es que de todas las novelas de la serie ésta es la que menos Bridgerton me ha parecido (tras la de Francesca, claro, que ésa pffffffff). Julia Quinn no se puede decir que sea una escritora de las que te hacen quitarte el sombrero, escribe de un modo sencillo, sin entretenerse en descripciones ni nada, nos habla de los personajes y punto pelota. Esta novela tiene sus toques de humor, eso que no nos falte, por Dior, y cada capítulo tiene un encabezado muy Quinn, donde se nos avanza y destripa algo de lo que va a pasar, pero, como libro perteneciente a una serie, tiene muy poco en común con los primeros. Ya no abunda el humor como antes y se echa de menos un personaje tipo lady Whistledown, que con esa mala leche que destilaba por todo Londres daba mucha vidilla a los libros y era un hilo conductor muy entretenido. Sinceramente, creo que esta serie gana leyéndose como lo he hecho yo, con bastante separación entre libro y libro e intentando no conectarlos más de lo necesario. No creo que los posteriores a Seduciendo a Mr. Bridgerton sean tan brillantes como los anteriores o ese mismo pero, de un modo aislado, cumplen su función. Yo desde luego, a pesar de lo negativo que menciono, he leído este nadismo tremendamente entretenida, tal vez porque no tenía ninguna expectativa previa, y estoy contenta de haber cerrado esta famosa saga con una sonrisa en la boca.

[Y que sepáis que, tras estos ocho libros, Julia Quinn nos ha regalado unos epílogos para ver qué ha pasado con esta loca familia años más tarde...]

Por todo, esto le damos al broche final de los Bridgertons en nuestro Gandymetro...

Gregory, si quieres amor verdadero, ven, que lo tengo bajo mi liguero


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5 comentarios:

  1. Ohhh parece que fue hace siglos cuando leí esta serie, la verdad que hay libros que gustan mas que otro, pero la serie en si esta muy bien. Yo que recuerde no he leído mas de esta escritora, pero tengo por ahí anotado en GR alguno si no recuerdo mal, muy buen post.bss

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  2. Menudo lio xD He tenido que leerlo un par de veces porque no estaba segura de estar enterandome xD le daré una oportunidad a la autora pero ya se verá si llego a este o no.
    ¡Un beso!

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  3. juuuuuuliaaa quinn moooola tio
    me encantan las Bridgerton
    aunque como tu dices esta y la de Francesca son las que "menos" me gustaron
    como siempre tu entrada y tus gifs, lo mas de lo mas
    un beesote

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  4. Leer a la Quinn es una gozada, como dices es sencillina y nada de misticismos.
    Francescas a parte, tengo buen recuerdo del primero y del segundo y el de H que no me acuerdo si es el anterior a este, creo que si.
    Jolines cada vez que leo estas reseñas me apetece volver a leer algunos libros, este en concreto no XD

    Bueno, bueno, lo que escondes bajo el liguero chatina.... XDDDDD

    Muuaks ;-***

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  5. Hola!!!
    Yo no sé si porque los leí muuucho después, pero los dos últimos no me estuvieron a la altura.
    Esta serie la tengo que releer ya que no he leído los epilogos !!! NOOOOOOO. jajajaja.
    A ver si me pongo... necesito 24 horas más al día!!
    Un besote

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